¿El marketing sonoro es efectivo?
Según estudios, la música aumenta las ventas en las tiendas
El arte de la música es ingeniosamente empleada en la actualidad como una poderosa herramienta para captar la atención del consumidor en las tiendas. El fenómeno, cada vez más común, ha sido respaldado por investigaciones que demuestran su influencia en las decisiones de compra.
De acuerdo con un reciente estudio de la Sociedad para la Administración de Recursos Humanos (SHRM), se ha constatado que el 72% de los encuestados reconoce cómo la música influyó en su elección de compra. Estas conclusiones están respaldadas por un informe de Retail TouchPoints, que afirma que el uso estratégico de la música puede aumentar las ventas hasta en un 9%.
La ciencia del neuromarketing ha contribuido a desentrañar los misterios de cómo la música impacta el cerebro y moldea el comportamiento del consumidor. Fascinantes descubrimientos han revelado que la música puede activar áreas emocionales y de memoria en el cerebro, lo que influye directamente en la percepción de la marca y en la experiencia de compra.
Los aspectos emocionales y de memoria que se despiertan a través de la música son cruciales para influir en el estado de ánimo de los clientes y, en consecuencia, afectar su comportamiento de compra. Se ha observado que al seleccionar la música adecuada para una tienda, se puede crear una atmósfera que refuerce la identidad de la marca, atrayendo a los clientes y haciéndolos sentir cómodos.
Un ejemplo claro de esto es el uso de música lenta y suave en tiendas de ropa, joyerías y boutiques, donde se busca brindar una experiencia de compra relajada y reflexiva. Por otro lado, tiendas de comestibles, supermercados y restaurantes optan por música más rápida y enérgica. El objetivo es estimular el ritmo de las compras y crear un ambiente dinámico que motive a los clientes a moverse y comprar con rapidez.
Por ende, es crucial destacar que la elección de la música en las tiendas debe ser cuidadosa y ligada a la identidad de la marca. No se trata simplemente de elegir canciones de moda, sino de crear una experiencia que refuerce los valores y la personalidad del negocio.